En medio de la grave crisis de apagones que atraviesa el país, la reciente medida del presidente Luis Abinader de declarar en emergencia las compras del sector eléctrico divide a los senadores dominicanos.

Mientras los legisladores oficialistas aseguran que se trata de una ejecutoria necesaria, la oposición considera que es solo un primer paso y refleja la falta de planificación en el sector.

El senador del Distrito Nacional, Omar Fernández, explicó que espera que la crisis energética se resuelva lo más pronto posible.

«No haber entendido que este país genera una nueva demanda cada año de aproximadamente 200 megas y no haberlo previsto con antelación es lo que nos ha llevado hoy a un decreto de emergencia, que podría terminar obligándonos a comprar energía mucho más cara que la que se adquiría», añadió.

Eduard Espiritusanto, senador de La Romana y vocero del bloque de Fuerza del Pueblo en la Cámara Alta, precisó que la situación actual podría ameritar que todo el sector se declare en emergencia.

«Hemos vuelto al siglo XX con los apagones y las situaciones que hoy en día afectan a nuestro país. Cualquier cosa que haya que hacer, yo la apoyo. Ahora, que se haga, no que solamente se diga de boca, como muchas veces ocurre: dicen que van a resolver y no resuelven», dijo.

El senador de La Vega, Ramón Rogelio, del Partido Reformista Social Cristiano, indicó que la medida está acorde con la situación actual, pero que el Gobierno debe realizar acciones complementarias para mejorar la generación eléctrica.

«Hay otras medidas complementarias, como la creación del fideicomiso HidroRD para financiar la construcción de las presas que están contratadas y las que faltan por contratar, así como establecer sistemas de hidrobombeo que garanticen una mejor composición de la matriz de generación, priorizando la energía renovable«, detalló.

Oficialismo defiende el decreto

El representante en la Cámara Alta por San José de Ocoa, Aneudy Ortiz, valoró la disposición presidencial e indicó que hay que resolver el problema energético «cueste lo que cueste«.

«Es un tema que nos ha golpeado muy duro en los últimos meses. Y sabemos que no contamos con las plantas necesarias ni con la energía suficiente para suplir la demanda que tiene el país en este momento», manifestó.

El senador de La Altagracia, Rafael Barón Duluc, aseguró que la medida representa un acto de «responsabilidad» frente a un déficit histórico.

«Declarar la emergencia nacional es un acto de responsabilidad y, a la vez, de asumir todas las consecuencias y compromisos que eso implica. Para nadie es un secreto que tenemos ese problema», manifestó.

Los legisladores, tanto de la oposición como del oficialismo, coincidieron en que la situación actual requiere implementar todas las medidas necesarias para subsanar el problema.

El decreto

El Gobierno dominicano ha declarado de «emergencia nacional» todas las compras y contrataciones vinculadas al sector eléctrico tendentes a incrementar la capacidad de generación, reducir la inestabilidad, suplir la demanda y fortalecer el almacenamiento.

El decreto 517-25, firmado el 8 de septiembre por el presidente Luis Abinader, autoriza a las empresas distribuidoras de electricidad (EDE), a la Central Termoeléctrica Punta Catalina y a la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana a realizar adquisiciones y contrataciones de forma expedita.

Estas incluyen obras, servicios, equipos y consultorías especializadas que permitan mejorar la capacidad operativa del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI).